Depresión adolescente (II)

La depresión es un trastorno mental caracterizado principalmente por un bajo estado de ánimo, sensación de tristeza persistente, pérdida de vitalidad e interés en actividades cotidianas, acompañado en ocasiones de síntomas físicos y emocionales. 

La depresión es una problemática a la que hay que prestar especial atención ya que el suicidio, que puede aparecer como uno de los síntomas de esta, es la primera causa de muerte en adolescentes y jóvenes de entre 12 y 29 años.

Supone una de las patologías más frecuentes y es la primera causa de atención psiquiátrica.

Síntomas de la depresión

Los principales síntomas de la depresión son:

  • Tristeza persistente
  • Disminución de la vitalidad
  • Pérdida de interés en actividades diarias o en aquellas que antes resultaban placenteras (anhedonia)
  • Problemas de sueño: insomnio o hipersomnia
  • Fatiga o cansancio excesivo
  • Sentimientos de culpa, inutilidad, incapacidad, irritabilidad
  • Pesimismo ante el futuro
  • Ideas de muerte o de suicidio: pensamientos frecuentes sobre la muerte, ideación o intentos de suicidio
  • Cambio o disminución del apetito y/o la lívido 

Para su diagnóstico es necesario determinar la intensidad de los síntomas, su duración (que al menos se presenten durante 2 semanas) y que dichos síntomas generen incapacidad, es decir que afecten al funcionamiento normal o adecuado de la persona. Para su diagnóstico el psiquiatra o psicólogo evalúa cuantos los criterios diagnósticos del DSM-5 para la depresión.

¿Cómo puede afectar la depresión en la vida del adolescente?

La depresión en la etapa adolescente afecta en varias áreas de su vida: 

  • A nivel académico: afecta a su capacidad atencional y a su memoria, lo que impacta directamente en su rendimiento escolar.
  • A nivel emocional: presentan un sentimiento de tristeza constante. La sensación de inutilidad afecta a su autoestima. 
  • A nivel social: aparece el aislamiento y sensación de soledad además de la pérdida de interés y la ansiedad asociada a la depresión.
  • A nivel físico: afecta al apetito, la lívido, el cansancio excesivo y a los problemas de sueño.
  • A nivel cognitivo: afectan a problemas de concentración y al curso del pensamiento apareciendo pensamientos negativos e ideas sobre la muerte o el suicidio.

Pueden aparecer también en los adolescentes conductas de riesgo como consumo de alcohol u otras drogas, restricción de la alimentación, autolesiones o intentos de suicidio.

Con el apoyo adecuado y la comprensión de las causas subyacentes de la depresión, los padres pueden ayudar a sus hijos a superar esta patología. Si estás preocupado por el estado de ánimo de tu hijo, puede contactar con el equipo de KOINÈ psicólogos para obtener asesoramiento y/o una valoración del estado emocional de tu hijo.

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